Hoy en día muchas personas parecen haber olvidado el gran valor que Dios ha depositado en su vida; llegando al punto de vivir como simples mortales sin estimación propia.
Muchas de las críticas y los malos comentarios que se reciben a diario pueden marcar la vida de una persona y hacer cambiar la percepción propia, llegando a disminuir la auto valoración y haciéndoles sentir inferiores a los demás.
Es importante tener presente que el hombre mira lo que está frente a sus ojos, pero Dios mira de una forma diferente, ya que Él ve más allá de lo físico y natural; «mientras que otros resaltan tus defectos Él mira lo mejor de ti».
«Y Jehová respondió a Samuel: No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón», 1 Samuel 16:7.
Perteneces a la realeza
Cuando se acepta a Cristo como Señor y Salvador, además de pasar de muerte a vida, el hombre pasa de ser criatura para convertirse en hijo de Dios y como su hijo también es heredero de su reino.
«Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable», 1 Pedro 2:9.
«Y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra», Apocalipsis 5:10.
Eres más valioso de lo crees
No son los logros ni en los méritos propios los que hacen a una persona valiosa, el verdadero valor que alguien pueda tener radica en el gran amor que Dios tiene hacia el.
«¿No se venden dos pajarillos por un cuarto? Con todo, ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre. Pues aún vuestros cabellos están todos contados. Así que, no temáis; más valéis vosotros que muchos pajarillos», Mateo 10:29-31.
«Mi embrión vieron tus ojos, Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas Que fueron luego formadas, Sin faltar una de ellas. ¡Cuán preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos! ¡Cuán grande es la suma de ellos!», Salmos 139: 16-17.
Dios te ha preparado una eternidad a su lado
Tanto amor tiene Dios por sus hijos que ha decido pasar la eternidad junto a ellos, ha enviado a su hijo a preparar la morada para todos aquellos que le aman y le buscan de corazón, ¡no eres cualquier persona, has sido predestinado a una hermosa vida al lado de tu Padre Celestial!
«Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna», Romanos 6:22.
«En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis», Juan 14:2-3.
Fuente: bibliatodo.com