El domingo 30 de mayo la Iglesia de Rancagua, ministrada por el pastor Mauricio Moreno y su esposa la pastora Norma Azócar, realizó un especial Sacramento de Santa Cena, por primera vez desde el hogar de cada familia, con motivo de la pandemia que afecta al mundo entero, no siendo ello impedimento para vivir una tarde bendecida de principio a fin.
La preparación espiritual y material comenzó con semanas de anticipación, con el objetivo de que nadie quedara fuera de esta actividad, recordando la importancia de este sacramento. De esta forma, hubo preparación a través de cultos, ayunos y oración, para que Dios fuera guiando todo el trabajo. Asimismo, hubo también un despliegue logístico para que todos tuvieran sus implementos para cenar con el Señor.
Más de 600 hermanos fueron parte de esta instancia especial, compartiendo durante la tarde un culto coordinado por el hermano Omar Rocha, Oficial Diácono; y con el mensaje de la palabra de Dios a cargo de nuestro pastor Mauricio Moreno, quien dio lectura en Hebreos capítulo 2 versículos 1 al 9.
La ceremonia de Santa Cena fue muy emotiva y especial, contando con la participación de todos los Oficiales Diáconos de la Iglesia, quienes dieron lectura al ritual junto a nuestro pastor, para luego dar paso a comer el pan y tomar el vino, símbolos del cuerpo y sangre de Cristo, que fue entregado en una cruz para Salvación de nuestras vidas. Es así como cada padre o madre de familia tuvo la honra de presidir en su hogar esta ceremonia.
Un día bendecido en la presencia de nuestro Dios.
“Nosotros no presumimos venir a esta tu mesa, ¡Oh, Señor misericordioso!, confiados en nuestra propia rectitud, sino en tus muchas y grandes misericordias”
Comunicaciones IMPCH Rancagua
