El pasado 4 de octubre nuestra iglesia tuvo la bendición de pasar a la mesa del Señor, como cada año se realiza junto a nuestro superintendente, Pastor David Garrido.
Dicha actividad comenzó con una reunión encabezada por el Pastor David Garrido, nuestro Pastor Luis Valdés y la junta de Oficiales Diáconos. Luego a las 17:00 hrs. Se dio inicio a este servicio especial donde la iglesia recibiría la Cena del Señor.
La presencia de Dios se hizo manifiesta desde el comienzo del servicio, donde nuestros corazones iban dispuestos y entregados a este solemne acto.
Nuestro Superintendente tuvo la bendición de compartir palabra de Dios a la iglesia la cual estuvo en el libro de Marcos 5:28 y 29.
Ésta hacía mención a la mujer que tocó el borde del manto de Jesús. La mujer venció todos los obstáculos, dentro de ella había fe y confianza en que aquel hombre sanaba y perdonaba. Su fe fue la que le movió y logró el objetivo. Esta fe Dios la confirmó y la mujer fue salva. Hoy esa fe ha ido disminuyendo, en muchas partes no se dan las glorias a Dios y tampoco se predica, aun cuando hay muchos que esperan el mensaje y no se pone por obra los dones que Dios dejó. No importa lo que estemos viviendo, aquí está Dios para sostenernos.
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