Alise Nipper llegó al hospital con heridas en su cuerpo, cerebro y pulmones, tras seis días ya estaba recuperada.
Era el 29 de julio cuando, tras una fiesta en la piscina, los invitados de la familia Nipper, en Missouri (EE.UU), entraron a la casa luego de que el clima cambiara. Alise Nipper, de 3 años, se había quitado el salvavidas cuando desapareció de la vista de su madre, Jamie.
Tras buscarla en la piscina, sólo la vio en el segundo chequeo, cuando saltó hacia ella gritando que llamaran al 911. “Estaba rogando que mientras la tomara empezara a toser como si acabara de caer, pero cuando la saqué del agua era evidente que estaba sin vida. Estaba azul”, dijo la madre a KFVS.
Una amiga intervino y comenzó a realizar la reanimación cardiopulmonar (RCP). Tras 12 minutos, el corazón de Alise volvió a latir, le volvió el color y comenzó a respirar, fuerte y ruidosamente.
Fue trasladada en ambulancia y llegó al hospital con heridas en el cuerpo, cerebro y pulmones, dijo el doctor Jeremy Garrett, del Cardinal Glennon Children’s Medical Center. Nadie sabía cuánto tiempo Alise había permanecido en el agua y sus lesiones eran traumáticas por la falta de oxígeno en el cerebro, pero tras seis días en el hospital, la menor comenzó a mejorar. Disminuyeron su sedación, despertó y hasta cantó. Dos semanas después estaba de vuelta en su casa.
Alise asombró a todos con su rápida recuperación. Su cerebro y pulmones se han recuperado, “podemos decir que ha vuelto a funcionar como un alto nivel para 3 años de edad”, dijo Garrett. No hay razón médica que explique el caso y ahora los padres de Alise están contando su historia no sólo como un milagro, sino para animar a la gente a aprender RCP.
Fuente: La Tercera