Un grupo de misioneros llegó a Belice con el propósito de llevar una Biblia o un libro cristiano a cada hogar del país.
Los misioneros de Mission Cry, tenían planeado ir a ministrar a una escuela para regalar Biblias y libros cristianos, pero cuando llegaron les dijeron que su evento fue cancelado.
Ante ello, uno de los misioneros sugirió ir a otra escuela, tal vez ahí la literatura cristiana sea bienvenida. Así ocurrió, condujeron hacia una escuela diferente y preguntaron si podían realizar un evento, la escuela aceptó.
“Esa mañana el decano de su escuela había estado orando para que Dios enviara Biblias ese día, porque los niños le estaban pidiendo desde el día anterior. Dios ordenó nuestros pasos, como Él dice en su Palabra: ‘los pasos de los justos están ordenados’.”, declaró Jason Woolford, director ejecutivo de Mission Cry.
Dios escuchó la oración del decano y guió a los misioneros para llevarlos a un lugar donde la gente estaba hambrienta de la Palabra de Dios. Los estudiantes quedaron más que felices al recibir una copia de las Sagradas Escrituras.
“Dios envió un grupo completo de 27 personas a la escuela. Michael Maher comenzó con la adoración, yo prediqué, mi hijo compartió su testimonio y al final, todos los niños recibieron sus Biblias y libros cristianos gratis por causa de la oración de ese hombre que provocó el mover de Dios”, compartió Woolford.
El decano de esa escuela entendió quién era él y entendió que con el Dios viviente dentro de él, podía orar y esperar que Dios hiciera algo glorioso. Así, también debemos orar nosotros con fervor y perseverancia.
Fuente: MNNonline (Impacto Evangelístico)