“Es en el año 1946, cuando el Obispo Presidente de la Iglesia Metodista Pentecostal de Chile, Rev. Manuel Umaña Salinas, envía al entonces hermano de Jotabeche N° 40, Delfín Fuenzalida Ponce y su esposa la hermana Luz Guzmán Rodríguez, junto a sus seis hijos, Hilda del Carmen, Rosa Elena, Ana Luisa, Ananías, Delfín Humberto y Daniel Enrique Fuenzalida Guzmán, para abrir una Obra en la localidad de Llay-Llay, en donde solo existía un Local de la Iglesia Evangélica Pentecostal. Es así como desde la ciudad de Santiago inician su viaje el día 31 de diciembre del mismo año para llegar el día 1 de enero a Llay-Llay, dando así inicio a la bendita labor”
Hoy ya se cumplen 67 años desde ese día, y hemos podido decir en este nuevo aniversario “Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones, y es el único que nos ha sido refugio de generación en generación”
Contamos con invitados durante seis días del mes de agosto.
El día domingo 3 de agosto, “Día de Acción de Gracias”, estuvo junto a nosotros el Pastor y Teólogo Wladimir Ponce, del Ministerio “Fe Activa”, quién inspirado por el Espíritu Santo nos habló en el Evangelio según Juan 4:7-10 “Jesús nos dice: Yo te daré de esa agua que saciará tu sed para siempre, y nunca más tendrás que buscar en los vicios, en el mundo ni en cosas vanas tratando de llenar el vacío que hay en tu corazón”
-El día domingo 10 nos visitó la Pastora Rodhe Silva Larenas junto a una delegación de hermanas Dorcas de la IMPCH Colina. El servicio de Dorcas comenzó a las 15:00 hrs y la Palabra de Dios fue exhortada por la hermana Milka Salas en el libro del profeta Miqueas, capítulo 6 “Dios nos pregunta ¿En qué nos ha fallado?, siendo todo lo contrario, y aun así, al nosotros haberle fallado, Él ha seguido teniendo misericordia de nosotros”. A las 18:30 hrs se dio inicio al servicio general, y la lectura y exhortación, esta vez, cayó en las manos de nuestra Pastora Rodhe Silva, en el libro de Filipenses, capítulo 3 “el cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya, por el poder con el cual puede sujetar también a sí mismo todas las cosas” No sabemos cuándo vendrá el Señor por nuestras almas, pero debemos estar preparados, reprendiendo de nuestras vidas todo espíritu contrario, todo espíritu de hechicería, toda maldición generacional, todo pecado y toda traición de nuestras mentes y de nuestros corazones… Debemos predicar, y nuestro blanco a seguir debe ser Cristo Jesús crucificado y resucitado, porque Él es el único que nos rescató de este mundo y quién nos bendice.
-Domingo 17, nos acompañó el hermano Abel Vargas y su familia, quienes deleitaron a la hermandad con alabanzas a nuestro Dios, y principalmente con la Palabra del Señor, la cual instaba a no ser un estorbo en la obra de la iglesia, sino a ser un buen siervo, un buen ayudante y un buen colaborador.
-Sábado 23, estuvo con nosotros el Pastor Luis Matus Sáez, la Pastora Juanita Garcés López y una delegación de la IUMP 1ª San Miguel. La fuerte lluvia y el temblor de aquel día no fueron impedimento para tener un maravilloso culto de adoración a Dios. La Palabra del Señor se encontró en el libro de Isaías 32:1-6 “Jesucristo es nuestro escondedero, nuestro pronto auxilio, nuestra roca, nuestro refugio, es el agua de vida que nos sacia; venga el terremoto que venga, el Señor te protegerá, no te pasará nada a ti ni a tu familia, Dios te protegerá cuando vayas al trabajo, a estudiar, a comprar, Dios estará contigo”
-Domingo 24, estuvo junto a nosotros el grupo Revelación Andina. Grupo de música cristiana andina, quienes entonaron hermosas alabanzas con sus instrumentos. La palabra del Señor nos instaba a seguir siempre en los caminos del Señor. El Señor nos iba a corregir, pero jamás debemos apartarnos de Él, porque con Él es donde nos conviene y donde debemos estar.
-Domingo 31, Pastor Guillermo Ossandón y delegación Iglesia CristianaPresbiteriana Viña del Mar. La Palabra de Dios se encontró en el libro de Efesios 4:7-12. “Formando a los santos” título que nos fue dado por el Pastor Ossandón. “El Señor trabaja y moldea a los santos conforme a sus necesidades, y dones que se les han sido otorgados, porque todos somos distintos y cumplimos un rol esencial en la obra del Señor” Además fue impartida la “cena del Señor” en gratitud por el nuevo año cumplido.
Agradecemos a Dios todas sus misericordias, todo su amor y todas sus bondades. Para nuestro Dios sea la Honra y la Gloria desde hoy y para siempre. Amén.
Cadmiel Toro F. | Corresponsal Departamento de Comunicaciones IMPCH